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Según los contribuyentes, estos son los motivos por los que el SAT les impide entrar con su contador a sus oficinas

El SAT nos envió una carta, pero no aclara mucho la situación.




SAT, Servicio de Administración Tributaria, Corrupción, impuestos
Foto: Archivo
13 febrero, 2018

Hace unas semanas nos percatamos de una queja constante en redes sociales: varios contribuyentes relataban que la autoridad fiscal no los dejaba pasar con sus contadores a sus oficinas para realizar trámites. Solicitamos una entrevista al SAT y, aunque no la obtuvimos, el fisco sí nos envió una breve misiva, en la que explicaron que el motivo era que los trámites son intransferibles; es decir, que el contador o abogado fiscalista no puede hacer el trámite a nombre del contribuyente.

Esto no respondió a la pregunta, pues los quejosos no entraban con sus asesores para que ellos hicieran el trámite en su nombre, sino que los llevaban en papel de asesores. Muchos se figuran que ir a las oficinas del SAT es como meterse a la boca del lobo; no es de extrañar que quieran hacerlo en compañía de alguien que pueda orientarlos.

Los motivos de la autoridad fiscal no son claros. Sin embargo, nuestros lectores tienen algunas hipótesis al respecto. Estas son algunas de ellas:

  1. Para filtrar prestanombres

Una práctica común entre los evasores es el uso de prestanombres para operaciones ilícitas como lavado de dinero o la creación de empresas fachada, con lo que se pone mayor distancia entre el autor del delito fiscal y las autoridades. Al no dejar que el contribuyente pase acompañado de alguien que pudiera aconsejarlo, la autoridad podría detectar estos casos con mayor facilidad.

  1. Por seguridad

Al realizar los trámites ante la autoridad se maneja toda clase de documentos e información personal importantísima. Al impedir el paso a toda persona indispensable en la realización de los mismos se podría disminuir el riesgo en este sentido.

       2. Para inducir errores

Algunos otros piensan que el fisco busca aislar a los contribuyentes para intimidarlos y abusar del desconocimiento que la gran mayoría tiene de los trámites y procesos de la institución.

       3. Por falta de espacio

A veces la respuesta puede ser de lo más sencilla. Quizás lo único que pasa es que en realidad las oficinas del SAT están abarrotadas. De hecho, varios lectores reportan que, al cuestionar a la autoridad, esta fue la respuesta que recibieron.  

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