Los ingresos por cobro a través de correo electrónico del SAT crecen 65%
El fisco recaudó un total de 3,300 millones de pesos el primer semestre por este concepto.
Los actos de control de obligaciones vía correo electrónico dejaron una recaudación fiscal de 3,300 millones de pesos en el primer semestre de 2016, un crecimiento del 65% con respecto a igual periodo de 2015, de acuerdo con el informe Tributario y de Gestión del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Este tipo de actos son procesos de cobro que hace el SAT con los contribuyentes a través de invitaciones y exhortos por diferentes medios de comunicación y van en paralelo con los actos de fiscalización y auditorías.
En los primeros seis meses del año, los actos de control de obligaciones en general dejaron al fisco una recaudación de 7,344 millones de pesos, un 32% más que los 5,531 millones del primer semestre del año pasado.
La mayoría de estos recursos provinieron de los actos de control vía correo electrónico, mientras que vía requerimientos y entrevistas se consiguieron 1,800 millones de pesos, cada uno.
En total, el fisco llevó a cabo 10,227 actos de control de obligaciones, un 27.4% menos que los 14,076 de enero a junio de 2015.
En sentido contrario, le resultaron al fisco los actos de fiscalización (auditorías y visitas domiciliarias), ya que permitieron recaudar 16,283 millones de pesos, un 29% menos que los 22,956 millones de 2015.
Esto se explica, en parte, por el menor número de actos de fiscalización, ya que bajaron de 19,180 en los primeros seis meses de 2015 a 16,040 en igual periodo de este año.
Sin embargo, la recaudación promedio por acto de fiscalización pasó de 1.2 millones de pesos el año pasado a 1 millón de pesos este año. El fisco explicó que se debe a que se enfocaron en fiscalizar actos que no generan tanta recaudación como las facturas electrónicas.
“La reducción observada en los actos de fiscalización se explica por los cambios en las estrategias de fiscalización. A partir de 2015, las auditorías se han focalizado en combatir conductas como simulación de operaciones o emisión facturas apócrifas, que no necesariamente implica una recaudación derivada del acto de fiscalización, sino propiciar un mayor cumplimiento voluntario, al inhibir estas conductas”, señaló el fisco en su informe.
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