Nuestro columnista, José Luis Rodríguez, del Colegio de Contadores Públicos de México, pone los puntos sobre las íes en torno al nuevo método de pago, el CoDi.
En las últimas semanas hemos sido informados por todos los medios de comunicación sobre el inicio de la operación obligatoria del código digital o CoDi (comenzando con 20 bancos). A pesar de ello muchos no tienen suficientemente claro en qué consiste esta novedosa plataforma, ni tampoco cuál será el impacto inmediato en la realización de pagos electrónicos.
¿Qué es el CoDi?
CoDi es una plataforma de pagos desarrollada por el Banco de México que opera mediante el sistema de pagos electrónicos interbancarios (SPEI). mediante CoDi se pueden realizar pagos electrónicos en segundos, por medio de un dispositivo móvil. Para ello se usa una aplicación de banca electrónica que usa la tecnología de los llamados códigos estáticos QR, o de aproximación NFC, de una manera eficiente y segura. El funcionamiento del método de pago se dará en un esquema 24×7 y funcionará en transacciones de hasta 8 mil pesos y sin pagar comisiones.
¿Cómo funciona?
- El vendedor, mediante un dispositivo móvil (teléfono celular o tablet) en donde tengan descargada la aplicación, genera una solicitud de cobro mediante un código QR o NFC.
- El comprador, mediante la aplicación de su banco en su teléfono celular, una vez que identifica la cuenta y el monto de la solicitud de cobro; autoriza y envía la instrucción de transferencia.
- El banco del comprador valida la transferencia y liquida la operación.
- Vendedor y comprador, reciben la notificación de pago.
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¿Qué pretende Banxico con esta novedosa plataforma de pagos?
De acuerdo a las propias palabras del Gobernador del Banco de México:
- Permitirá la bancarización de 30 millones de personas durante este sexenio.
- Incorporará nuevos clientes potenciales de servicios financieros.
- Buscará ser un catalizador para formalizar la economía del país.
- Limitará las actividades ilícitas como el lavado de dinero, la evasión fiscal y los actos de corrupción, a través de la reducción del uso de efectivo.
- Facilitará la dispersión y entrega de las dádivas (apoyos sociales y económicos) instrumentadas por este gobierno.
Considerando la información de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2018 del Inegi, podemos observar que el efectivo es el medio predominante de pago para todo tipo de transacciones. A nivel nacional, el 87% de las personas lo utiliza para realizar compras mayores a 500 pesos; mientras que solo el 10% de los adultos efectúa pagos de bienes y servicios mediante su cuenta bancaria y apenas el 2.7% utiliza el teléfono celular, a pesar de que el 93% de la población total en México se conecta a internet por este medio.
Derivado de lo anterior se entiende y se justifica plenamente la iniciativa de Banxico, sólo debemos estar muy consientes de que conseguir “desmonetizar” la economía en México es una meta de muy largo plazo que deberá ser apuntalada con educación financiera, medidas y programas innovadores que incentiven a la población a renunciar el uso del efectivo a cambio, tal vez, de obtener beneficios como diversos tipos de créditos en condiciones preferenciales y tasas competitivas que representen una situación de ganar–ganar para todos.
Para la reflexión…
El Contribuyente es un medio plural que admite puntos de vista diversos. En tal sentido, la opinión expresada en esta columna es responsabilidad sólo del autor.
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