¿Es buena idea declarar en ceros como parte de una estrategia fiscal?

14 noviembre, 2017

Algunos contribuyentes han optado por esto para tener mayor liquidez.

Cuando un contribuyente no tiene ingresos debe hacer una declaración en ceros, lo que ampara que no tenga que pagar impuestos correspondientes a dicho ejercicio. Algunos contribuyentes han pensado en formas de usar esto como parte de una posible estrategia fiscal que, si bien no les permite pagar menos impuestos, sí les podría servir para llevar a cabo una reestructuración financiera.

Imaginemos que una empresa que necesita liquidez para financiamiento opta por declarar en ceros en algún mes para poder disponer de algo más de dinero. No pasa nada, podrían pensar, a final de cuentas se va a poner al corriente con el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Resulta que sí pasa, pues según el artículo 109 del Código Fiscal de la Federación la autoridad podría tipificarlo como delito fiscal, lo que alcanza hasta cárcel.

Antes, los contribuyentes que optaban por este tipo de estrategias tenían un mayor campo de acción, pues la autoridad en ocasiones tardaba bastante tiempo en darse cuenta de que alguien había declarado erróneamente en ceros. Hoy en día, gracias a la facturación electrónica, el SAT se da cuenta de esto con mucho mayor facilidad, con lo que puede fincar un crédito fiscal o hasta un delito por defraudación fiscal.

Cuando el SAT no tenía una capacidad de fiscalización tan apabullante, un contribuyente que un mes declaró en ceros erróneamente podía rectificar después su situación fiscal sin que muchas veces la autoridad siquiera se diera cuenta. En la actualidad, que el SAT no sólo cuenta con la declaración informativa de operaciones con terceros (DIOT) para triangular información sobre un contribuyente, sino también con historiales de facturación, esto es mucho más difícil.

En cualquier caso, no hay que pasar por alto que el artículo 109 del CFF prohíbe expresamente la declaración de ingresos menores a los que realmente se tuvieron, por lo que bajo ningún concepto es una estrategia recomendable.